Fin de semana intenso en Alicante que ha dejado en el Coro una experiencia maravillosa y única. El frío que nos llevamos de casa se fue entibiando al imponente abrigo de Mariola y Aitana en el camino. Nos recibió una ciudad cálida y amable en la que viven también muchos conquenses. Gracias a Antonio Buendía, presidente de la Casa de Cuenca en Alicante por la incansable difusión que dio de nuestros conciertos y su apoyo incondicional. Agradecemos también su generosa disponibilidad a los párrocos de la basílica de Santa María y de la parroquia de San Juan Bautista, D. Manuel Martínez y D. Joaquín López, respectivamente, no olvidaremos la invitación a volver que ambos nos han hecho. Inolvidable Alicante.